El Gobierno necesita ajustar qué parte de ese dinero usaría con ese fin y están negociando ese porcentaje con el organismo que dirige Kristalina Georgieva. Y es que, tal como indica a Ámbito el economista de la Universidad de Avellaneda Pablo Ferrari, «ante la escasez de dólares, con los ingresos de distintas fuentes que se generen, Economía deberá administrar qué importaciones son las más relevantes para sostener el impulso del producto, en primer lugar, e intervenir en el mercado cambiario para evitar posibles desestabilizaciones cambiarias, por otra lado».
En ese sentido, a la hora de fijar prioridades, el economista de EcoGo Lucio Garay Méndez indica que, si bien falta para el 20 y 21 de junio, que es la próxima fecha de pago al FMI, y el Gobierno debe resguardar dólares para ese fin.
De esta manera, Alejandro Giacoia, economista de Econviews sostiene que, «si no se modifica el perfil de vencimientos, los dólares que desembolse el FMI son necesarios para cubrir esos pagos», incluso aunque se modifique el momento del desembolso.
Sin embargo, Garay Méndez advierte que todo indica que «este período de stand-by que corre mientras suceden los cambios políticos se esta llevando puestos los dólares del Central, que, en las últimas semanas, aceleró su intervención mercado de los paralelos», lo que podría cambiar las prioridades.
Desde EcoGo, calculan que, debido a esa situación, las reservas netas se redujeron debajo de los u$s1.300 millones. Y, ante esa situación, Garay Méndez advierte que “es una incógnita qué destino van a tener realmente esos fondos”, ya que, por un lado, el Gobierno los necesita para pagarle al propio Fondo, pero, al mismo tiempo, los pocos dólares que hay se están yendo para pagar importaciones, aunque muchas menos que el año pasado, y para controlar la brecha cambiaria, por lo que se necesitan divisas para apuntalar esos frentes.
Fuente: Ambito