Entre otros factores que incidieron en una nueva aceleración de la inflación, Marí subrayó: “Hay que tener en cuenta que en mayo hubo cierta presión de los precios regulados por la actualización de tarifas. Algo que no se repetiría en los próximos meses y que, entonces, podría contribuir a que la medición del IPC se desacelere unas décimas. Sin embargo, lo que está claro es que la suba de precios en Argentina se ha estabilizado en un ritmo bien por encima del 7% mensual, dejando muy lejos la promesa del 4% hecha en 2022”.
Por su parte, Claudio Caprarulo, director en Analytica, estimó una inflación mensual del 8,9% para mayo (desde la firma habían previsto una suba del IPC del 8% en abril). “Hay un componente inercial muy importante, que se nota en los productos de consumo masivo, un efecto al que se sumó este mes la actualización de las tarifas de energía”.
Hacia adelante, el economista estimó que la inercia continuaría en junio, “porque se observa un régimen de alta inflación y una de sus características es que el traslado a precios es muy rápido”.
En tanto, desde Eco Go resaltaron que “se consolida la inflación de 9% para el mes, marcando el inicio de otro régimen inflacionario en lo que resta del año”. Esta consultora había estimado un alza del 7,3% para el mes pasado.
Por su parte, desde la firma C&T, proyectaron que la inflación de mayo se ubicaría en torno al 8,5%. Para abril, la medición de la consultora había dado una variación de 7,6%.
Fuente: Ambito