El Gobierno inicia 2023 con una larga lista de acuerdos de precios que buscan controlar el ritmo de las remarcaciones. El objetivo del ministro de Economía, Sergio Massa, es arribar a abril con una inflación mensual en torno al 3%.

Enero llegará, de todas maneras, con una serie de aumentos ya comprometidos –algunos con reajustes anuales en un solo tramo de hasta 80%–, que van desde los combustibles y transporte público al servicio de medicina prepaga.

Combustibles

El Gobierno firmó a fines de diciembre un acuerdo con las petroleras YPF, Shell, Axion y Puma para incorporarlas al programa Precios Justos. Según lo convenido, la nafta y el gasoil no deberán subir más de 4% durante los primeros tres meses y 3,8% en el cuarto mes.

El último aumento dispuesto por la petrolera estatal –la que marca el pulso de las subas– fue el 4 de diciembre, del 4%. Por lo tanto, se anticipa que habrá un nuevo ajuste en los primeros días de enero, de otro 4%.  

Si se toma como referencia los precios de la Ciudad de Buenos Aires, el costo de los combustibles en YPF quedará en $156,94 el litro para la nafta super; $192,19 la premiun; $168,6 el gasoil común y $229,70 el premium. Esto será en la segunda quincena de enero, según el acuerdo con el sector.

Por otra parte, el Gobierno suspendió hasta abril el incremento de los impuestos a los combustibles líquidos, para evitar un mayor ajuste en los precios de las naftas y el gasoil.

Aumento de prepagas

Las cuotas de la medicina prepaga completarán el 13,8% previsto para diciembre que el Gobierno decidiera desdoblar en dos tramos de 6,9% en diciembre y enero, luego de una crítica abierta de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kichner a la magnitud del aumento anual acumulado para 2022.

Además, desde febrero se aplicarán cambios en la facturación. Por el plazo de 18 meses, para quienes tengan ingresos netos inferiores a seis salarios mínimos, vitales y móviles ($406.458 en febrero), el incremento del valor de las cuotas tendrá como tope máximo el 90% del índice de salarios del mes anterior.

Electricidad y agua

Las tarifas de energía y agua continuarán con incrementos de acuerdo con los esquemas de segmentación y quita de subsidios vigentes. El Gobierno convocó a una audiencia pública para estudiar el aumento de las tarifas eléctricas en la Ciudad y el Gran Buenos Aires, donde Edenor y Edesur tienen la concesión del servicio público de distribución.

El encuentro se concretará el lunes 23 de enero de 2023 a partir de las 8.30 y de allí saldrá una “tarifa de transición” entre febrero y marzo, hasta que se complete la Revisión Tarifaria Integral (RTI).

Telefonía, internet y televisión

En los últimos días de diciembre el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) autorizó a las empresas prestadoras de servicios a aplicar aumentos de hasta 9,8% en febrero y de hasta 7,8% para el mes de abril en los servicios de telefonía, internet y televisión.

En 2020 el Gobierno emitió un DNU que declaró servicio esencial a las telecomunicaciones y le dio la facultad de disponer los reajustes de precio, que hasta ese momento dependían solo de las empresas proveedoras. Sin embargo, las grandes compañías fueron a la Justicia y consiguieron cautelares que bloquean el alcance del decreto, por lo que continúan disponiendo del ajuste de sus propias tarifas, por encima de lo autorizado oficialmente.

Alquileres

El miércoles pasado, la agenda de la sesión de Diptados prevista –que finalmente no tuvo quorum– incluía la discusión de la ley de alquileres vigente. El asunto llega al recinto con dos dictámenes opuestos: uno que intenta revertir sus puntos más “polémicos” (la extensión de los contratos y la fórmula de actualización) y otro que suma más regulaciones sobre los contratos.

Mientras no se avance en modificaciones sobre la ley vigente, los nuevos contratos y las renovaciones anuales continuarán regidas por el índice que elabora el Banco Central en base a la variación de la inflación y de los salarios, que en diciembre fue de 77,5%.