El PJ y una tormenta imperfecta en búsqueda de unidad para la conducción

El caso Chubut y la pelea del gobernador Ignacio Torres con Javier Milei por la quita de recursos coparticipables muestran un escenario de conflictividad in crescendo entre las provincias y Nación. No obstante, en la Casa Rosada, mientras el Presidente activa la metralleta en X (ex Twitter), sigue la conversación con mandatarios que una vez que ingresan a Balcarce 50 se muestran dispuestos a dialogar.
Asimismo, el llamado de Axel Kicillof a una reunión plural de gobernadores para defender recursos provinciales, no encontró eco en sus pares y se desactivó pronto esa opción. El bonaerense cosechó menos respaldo que el mandatario de Chubut en su denuncia por el fin del Fondo para el Fortalecimiento Fiscal. Tal vez, ya están en juego posicionamientos y liderazgos al interior de cada partido.

Fue el turno del salteño Gustavo Sáenz, peronista renovador, quien cerca del mediodía llegó a las oficinas del ministro del Interior, Guillermo Francos. El lunes, había sido el chaqueño radical Leandro Zdero, quien busca renegociar una deuda similar a la Torres. Este miércoles está agendado un gobernador patagónico, que hoy estará en el Senado acompañando a Torres en su reclamo, tras haber firmado el pasado viernes la carta que amenaza con el corte de petróleo.

El fin de semana, Francos se verá con el mendocino también UCR Alfredo Cornejo en el marco de la Fiesta de la Vendimia, a la que podría sumarse otro mandatario cuya provincia está ligada a la vitivinicultura, como el sanjuanino Marcelo Orrego, de JxC. Sumado al encuentro con cinco norteños la semana pasada en Salta y al paso breve por Corrientes, Francos habrá visto a una decena de mandatarios en las dos semanas más explosivas del vínculo Nación-gobernadores.

“Las provincias quieren plata, nosotros queremos leyes”, repiten en la Casa Rosada, y apuestan por el largo plazo. Creen que las cuestiones fiscales se resolverán y para eso insisten con respaldos legislativos, que en rigor asoman cada vez más lejanos. Mientras observan con curiosidad la amenaza de Torres: reina la incógnita operativa sobre cómo sería el cierre del grifo del petróleo, y por cuánto tiempo sería sostenible. Lo mismo ocurre con el envío de energía hidroeléctrica desde las represas de la región.Para el Gobierno, hay gobernadores más y menos pragmáticos. “Cuando estuvieron los 23 gobernadores acá sentados, ninguno pide por los jubilados, todos piden por sectores específicos de sus provincias, cuidan el pago chico”, mencionaron desde el Gobierno. Así, cada mandatario se sienta con demandas, aunque rara vez se van con respuestas concretas en un escenario de incertidumbre.Llamó la atención que no hubo correspondencia entre los apoyos que recibieron Torres y Kicillof. El primero obtuvo gestos de mandatarios de todos los signos y mostró la cohesión de los patagónicos como región y de Juntos por el Cambio como liga. Aunque recibió palos de su partido de origen, el PRO, desde el ala motorizada por Patricia Bullrich, con comunicado oficial incluido.

Kicillof, por su parte, no termina de encolumnar al peronismo, que lo ve naturalmente en condiciones de emerger como candidato nacional. Nadie recogió el llamado de ayer desde La Plata a una cumbre masiva. De la liga PJ solo asomaron en estos días el formoseño Gildo Insfrán, el pampeano Sergio Ziliotto y el riojano Ricardo Quintela. Algunos soldados se perdieron en el camino: el tucumano Osvaldo Jaldo, el misionero Hugo Passalacqua (provincialista, en rigor), el salteño Sáenz.

Mientras que bajaron el perfil el catamarqueño Raúl Jalil, quien brega por una ley para atraer inversiones mineras, así como el santiagueño Gerardo Zamora (que ayer reapareció para avalar a Kicillof en Twitter) o el fueguino Gustavo Melella. Este último sí jugó fuerte en favor de Chubut, y también anunció el freno al petróleo desde su distrito.

A diferencia de la fallida reunión de Kicillof, se mantuvo la conferencia de prensa de los patagónicos en el Senado, que tendrá un contenido similar en lo discursivo que el que expresó el lunes Torres en la legislatura chubutense.

Defensa del federalismo, cuestionamientos a Milei y amague (ahora con poderes) para detener la producción hidrocarburífera, si bien ni gremios ni sus pares están dispuestos a quemar las naves tan pronto. Será un scrum variopinto: Torres (PRO), Melella (radical K de Forja), Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro), Rolando Figueroa (Comunidad, exMPN) y Ziliotto (PJ).

Fuente: Ambito